Voy a hacer algo con mi vida.

Hoy es uno de esos días en los que te paras a pensar en que estás haciendo con tu vida. Así, sin más. Te quedas en silencio y piensas, "Pero, ¿Qué estoy haciendo?". Te das cuenta de que los días van pasando, al igual que los meses y los años y...nada cambia. Una vez me dijeron que a los 16 años, la vida cambiaba, y maldigo el momento en el que me lo creí. Con 15 años, me creía los "te quiero". Y ahora a los 16, me creo los "tranquila, todo irá bien". ¿Pero que cojones os pasa? ¿Malas rachas? ¿Casualidades? No. Estoy harta de que todos me digan lo mismo, que solo son casualidades de la vida. Yo más bien pienso que es el karma, que el jodido mundo se ha puesto en mi jodida contra, así y ya. No voy a empeñarme en que todo salga bien, en ir detrás de las cosas, en luchar por que los sueños se me hagan realidad alguna vez. Con patadas nací y con patadas me hicieron. Pero me he dado cuenta de que, debo hacer algo con mi vida, a la de ya.

Te llamo sin la "LL".

Cenicienta tenía a un príncipe, al igual que tenía un zapato de cristal. Blancanieves tenía 7 amigos enanos y un príncipe que también la quería. La bella durmiente tenía un sueño profundo y al igual que las otras dos, también tenía un príncipe. Y así podría seguir eternamente, pero, ¿para qué? yo tengo algo mejor que ellas, mucho mejor, algo que supera todo el infinito con creces. La tengo a ella. ¿Soy lesbiana? No. ¿Estoy enamorada de ella? No, bueno quizás, pero eso es otro tema xd. Ella es como mi aire, pero sin el como. Es mi hermana, mi otra mitad, mi otro yo. Respirar lejos de su cuerpo es algo insoportable, al igual que lo es enfadarme con ella, o dejar de escuchar su voz por un instante. Y es que, después de tanto tiempo, te das cuenta de que no necesitas dos millones de amigos para ser feliz, que con uno te basta, y que con ese amigo puedes ser la persona más feliz del jodido mundo. Y mira que te digo, yo jamás daría nada por la gente, pero por ella sería capaz de dar la vida, y si no os lo creéis podría demostrarlo. Si ella llora, yo lloro. Si ella ríe, yo también. Si me necesita, en dos segundos estoy en su casa. No la cambiaba por nada, y cuando digo nada, es nada. En las buenas, está allí y en las malas también. Comparto mis risas y también mis rayadas, problemas y demás mierdas. Cuando todo va mal, tan solo necesito verla aparecer y que me sonría, entonces, todo a mi alrededor se detiene y entonces entiendo, que todo, absolutamente todo, saldrá bien. Por esto y muchas cosas más, gracias Nuria, G R A C I A S.

Ei que sí, que te entiendo.

Estoy harta, muy harta de los "te entiendo, te entiendo". ¿Qué entiendes? No entiendes nada, absolutamente nada. Deja de decir que sabes lo que siento, que te pones en mi piel, siendo que no lo haces, ni lo intentas, abandona esa misión que no tiene ni pies ni cabeza. No digas que entiendes, cuando en realidad, no has llorado por un beso, ni has suplicado por una caricia. No digas que entiendes, cuando no has soñado con estar tumbada en el sofá mientras otra persona te mira, mientras que otra persona, te quiere. No digas que entiendes, cuando hablas por hablar y cuando te callas es porque sabes que has quedado en ridículo. ¿Sabes? yo siempre digo, que entiendo, que sé de lo que me hablan, ¿y qué?, yo lo demuestro, demuestro que escucho y doy argumentos para que los demás también lo crean. En cambio, esa gente...si se les puede llamar así, ni entienden ni dejan de hacerlo, es un proyecto en su mente, que jamás lograran desarrollar. La cosa es que, tú eres tú, y tú tienes tus problemas, que como es de lógica, son tuyos. No se los digas a cualquiera, porque te soltarán un "te entiendo", mientras que por su mente pasa un "cállate o te juro que te mato".

No sabes cuando puede acabar.

Me he dado cuenta, por fin, de que las cosas que empiezan, siempre acaban. Quizás no te guste, pero debes tomar la decisión, de acabar, de empezar, de seguir o de aceptar que ni se puede acabar,ni empezar ni seguir hacía ningún lado. Pensar en que aquello iba a salir bien, era muy fácil, quizás demasiado. Pensé en estar toda la vida a su lado, incluso pensé en que si fuéramos mayores, nos podríamos casar, y tener hijos...¿Para qué?, eso también es llamado el castillo que se rompe, tú te ilusionas, y el propio tiempo lo destroza todo, sin más, sin venir a cuento. No fue tu culpa, pero tampoco fue la mía. No lo hiciste queriendo, al igual que yo tampoco lo hice a posta. Ninguno de los dos teníamos las cosas claras, ya que somos jóvenes, pero primero viene uno, y después otro. No me voy a quedar sin amar, sin sentir cariño, sin querer a alguien, sin morirme de ganas por un beso, un abrazo, una caricia, una llamada, un mensaje. Escribí tú nombre, hasta en mi piel, tenía mi habitación rodeada de fotos tuyas, mi carpeta...mi ordenador, el móvil, todo. ¿Y qué? ¿Por eso hemos durado más? Que va, ni mucho menos. Eran muchas las cosas que iban en nuestra contra, pero sé que algún día encontraré a alguien, que me vuelva a dar todo lo que tú, intentaste darme.