sábado, 30 de junio de 2012

Mi pequeño gran superhéroe.

-Todas las mujeres queréis lo mismo, no queréis un tío, queréis un puto superhéroe.

 +Para nada.

 -¿Qué no? A ver, ¿tú qué tipo de tío quieres?

 +Pues yo quiero un tío que me haga tocar las estrellas, que me lleve hasta París un sábado cualquiera sólo para tomar café mirando la Torre Eiffel. Quiero que haga de sus dedos recorriendo mi piel una puta adicción para mí. Quiero un tío que nunca permita que abandone los sueños que me quedan por cumplir y me ayude a reinventar los que había dejado por imposibles. Quiero que me prometa bajarme la Luna si se la pido, que me desgaste los labios y me rompa las medias. Quiero que viva la vida sin prisas, como yo. Quiero que su único vicio sea pasar la noche conmigo y que haga que mi canción preferida sea su risa. No quiero que me regale garantías ni planes de futuro, pero sí que me prometa un “aquí y ahora”. 

- Pues eso, quieres un puto superhéroe.

 +Sí, tal vez tengas razón, quizás todas queramos un superhéroe, pero en realidad todas sabemos que no existe, y por eso siempre acabamos conformándonos con el primer gilipollas que nos promete mil “Te quiero” y algún que otro “Buenos días princesa”.

Dime.

+ ¿Cuánto dirías que le amas? ¿Es amor, es un gran amor o un amor enorme?

- ¿Qué?¿Quii…?¿Có-ómo?…

+ Verás, un amor se supera en dos meses. Un gran amor en 2 años pero uno enorme…

- ¿Sí?

+ Un amor enorme te cambia la vida.

Ahora mismo, no puedo.

Hola en estos momentos no puedo atenderte porque ando medio ocupada realizando una serie de cambios en mi desastrosa vida. Estaré un tiempo ocupada con estos asuntos tan estúpidos para ti, pero tan importantes para mi. Si lo prefieres puedes mandarme un mensaje con tu nombre y si eso , ya te devolveré la llamada. Si esto no tiene lugar, será porque uno de eses cambios eres tú. O quizá también porque me haya quedado sin saldo.

El amor y sus 4 pasos.

1.Conocer a alguien.

 2.Ilusionarse y montarse la película. 

3.Desilusionarse y jurarte a ti mismo que no volverá a pasar.

 4.Vuelta al paso 1

martes, 12 de junio de 2012

No cumples lo que dices.

No sé si será cosa del destino, pero todo el mundo me promete cosas, cosas inverosímiles incluso imposibles de realizar, pero promete, como si fuera el último día sobre la tierra y tuvieran que quedar bien con todos. Y a mi...esas cosas no me van. No me van las promesas que no se cumplen, o las promesas que se dicen por decir. Por eso nunca te voy a prometer estar contigo siempre, ni te voy a prometer que te voy a querer hasta que mi corazón deje de latir. Ni te voy a decir que eres la razón de mi existencia, y que sin ti no vivo. Y a cambio, no me prometas que no te olvidarás de nada, que te importó, porque tus promesas son idiotas, y por alguna razón, nunca cumples lo que dices.

lunes, 11 de junio de 2012

Y por eso, créeme.

Créeme que cuando te digo "te quiero" lo digo porque es verdad, porque te quiero infinito ida y vuelta a paso de caracol y poquito a poquito para que nunca acabe. Cuando amo, amo de verdad sin condiciones y sin papeles, sin ningún interés y con todas las consecuencias que el amor conlleva.

De repente, ni existes.

Un día te habla, el otro te ignora, un día tontea contigo y al otro no existes. Me da rabia tener que aceptar que esto es lo que me pasa bastantes veces. No intento dar pena, ni nada por el estilo. Lo que si que me da pena, es la gente que cree que la vida no tiene sentido si no tienes alguien a quién amar, o alguien a quien besar. Que todo depende de un hombre o una mujer. Cierto es, que todo es mejor cuando estás enamorado, y te corresponden. También es verdad, que no hay nada peor que un amor no correspondido. Quizás le doy muchas vueltas a las cosas, y no deba hacerlo. Cada vez que lo pienso me arrepiento más de haberle conocido y me dan impulsos de...borrarle de mi vida. De apartarme, alejarme un poco más. ¿Por qué no puedo? El cerebro y el corazón, se pelean constantemente, el cerebro lleva al corazón atado con una cadena, le da ordenes y le explica los peligros que puede sufrir. Pero el corazón va a lo suyo, nada le importa, se deja llevar. Así que, me voy a pasar a tu bando, un día te hablaré, el otro te ignoraré, otro día tontearé contigo y al otro ni existirás.

domingo, 10 de junio de 2012

Aprendí a no creerme todo lo que la gente dice.

La mayoría de las personas de este mundo en cuanto tienen la oportunidad hablan de si mismos con una sinceridad pasmosa. Suelen decir frases del tipo: “yo parezco tonto de tan franco y sincero que soy” o “soy muy sensible y me manejo muy mal en este mundo” o “yo le leo el pensamiento a la gente”. Pero he visto innumerables veces como personas “sensibles” herían sin más los sentimientos ajenos. He visto a personas “francas y sinceras” esgrimir sin darse cuenta las excusas que más les convenían. He visto cómo personas que “le leían el pensamiento a la gente” eran engañadas por los halagos más burdos. Todo ello me lleva a pensar: ¿Qué sabemos, en realidad, de nosotros mismos?. Cuanto más pienso en ello, más reacia soy a hablar de mí misma. Quizá se deba a eso, pero me he habituado a trazar una frontera invisible entre mí misma y los demás. Empecé a tomar una distancia perpetua ante el otro, fuera quien fuese, y a mantenerla mientras estudiaba mi actitud.

sábado, 9 de junio de 2012

Ofreceme un suspiro.

No voy a mentirte, o al menos hoy no. Tan solo vengo a decirte, que no soy perfecta, y voy a seguir sin serlo. Quizás no tenga todo el dinero del mundo, para poder cumplir tus fantasías, ni tenga todo el tiempo del mundo para estar pensando en ti. Pero hay cosas, que si que puedo asegurarte, como que pienso en ti siempre que puedo, que sonrío como una estúpida al escuchar tu nombre, o al ver que el nombre que aparece en la pantalla de mi móvil es el tuyo, y me estás llamando. Sonrío al despertarme y ver que me has enviado un "buenos días princesa". Sonrío mirando tus fotos y pensando a que sabrán tus besos. También te puedo asegurar que te quiero, soy una Don Nadie, pero nadie te va a querer más que yo. Ni te imaginas cuanto te echo de menos, tengo miedo de sufrir cada segundo de tu ausencia. Pero aún así, rezo, confiando en poder verte aún sin creer en Dios. Y es que estoy hasta los huevos de que nada salga bien, de soñar constantemente con acariciar tu piel, de no poder sacarte de mi mente ni un instante, firmaría hasta mi muerte por tenerte aquí delante. Un segundo para respirar tu aire, ofréceme un suspiro y me habrás dado mas que nadie. Ahora quiero estar contigo, lo demás no me importa, y es que te estaría besando en este instante si pudiera. ¿Qué quiero? ser tú única necesidad, que no puedas pasar un día sin escucharme, sin pedirme un "te quiero". Eh, y te digo esto mientras me trago el orgullo,si quieres tíralo pero mi corazón es tuyo.

martes, 5 de junio de 2012

Te juro que esperaré.

Soy tonta. Tonta e ingenua. Ingenua por creerte, por creer que podías cambiar, que podías llegar a ser algo para mi. Tonta por seguirte, por intentar enamorarte. He llegado a la conclusión de que si mi vida fracasa, ya no es por mi culpa. Yo lo doy todo, todo lo que tengo a mi mano y a cambio, no recibo nada, absolutamente nada. Me doy cuenta de que tú no te mereces nada de mi, ni siquiera un "hola", pero como ya he dicho, soy tonta e ingenua. Sé que de momento estoy sola, y que seguiré soñando que estoy sentada en el sofá con alguien que me acaricie la pierna disimulando. Soñaré que duermo de espaldas y unos brazos me rodean la cintura y unos labios besan mi cuello mientras susurran un "buenas noches princesa". Estoy bastante cansada de la gente que dice ser ese "alguien", que va haciéndome ilusiones para luego destrozarlas todas, de golpe. Yo sé, que algún día llegará esa persona, mientras tanto, esperaré, esperaré como llevo haciendo, casi toda mi vida.